El hijo zurdo
Dir. Rafa Cobos y Paco Baños | 2022 | Movistar, Atípica Films | 6 caps. 30 min. Miniserie tv
CANNESERIES Premio a la Mejor Miniserie, 6º Cannes International Series Festival
Rafa Cobos ha demostrado su gran talento como guionista en toda la filmografía de Alberto Rodríguez, en esta ocasión se hizo cargo por primera vez de la dirección de esta particular serie para Movistar demostrando que ha ocupado con derecho un lugar en la cinematografía de nuestro país. Para interpretar este trabajo me había dado como referencias Una mujer bajo la influencia de Cassavetes o Mommy de Xavier Doland; conjugar ambos estilos en un proyecto era nuestro gran reto. Quería hacer una ficción muy particular con capítulos a modo de píldoras en la que la historia estuviera contada muy encima de su protagonista principal. También mencionó el libro La belleza del marido –de la poeta Anne Carson– un relato a modo de diario-crónica de un matrimonio que como el de nuestra protagonista se descompone. Es un intenso y vital ensayo en formato poético que podía reflejar las sensaciones visuales que Rafa quería transmitir. La serie como el libro en apariencia sin unidad estructural estaría rota, dividida en emociones a lo largo de escenas que se encabalgan alternando tiempo real y algunas elipsis. Faces, Kramer contra kramer, la china Tormenta de hielo o su 7 vírgenes fueron algunas otras de las referencias que puso sobre la mesa al comienzo del proyecto. El guion es una adaptación muy libre del libro de título homónimo de Rosario Izquierdo. Debíamos recrear la atmósfera de una madre adicta, frente al retrato nada romántico de su familia que ve desmoronarse, y a quien acompañamos con la cámara en mano en largos recorridos desde su entorno de clase alta sevillana a los barrios obreros.
María León interpretaba a una madre alcohólica que encuentra en un personaje espejo (Tamara Casellas) un inesperado consuelo que lleva al espectador a un contexto muy diferente de barrios humildes, polígonos industriales, bares y casas modestas cuyos interiores trabajamos muy realistas y en contraste con los chalets junto al campo de golf, casas señoriales o la alcaldía del ambiente sevillano de clase alta a la que pertenece la protagonista. Entre los decorados principales trabajamos las viviendas de las protagonistas, una comisaría, la gran finca familiar –donde trabajamos un suntuoso interior que sería cuidadosamente descrito en un un largo plano secuencia que lamentablemente no se mantuvo en el corte final–. En la casa de la familia protagonista apostamos por una ambientación neutra casi estéril; multiplicamos los reflejos, la continuidad entre unos espacios asépticos y enfatizamos su fría arquitectura tratando de retratar lo inhóspito de un hogar en una familia disfuncional aparentemente feliz y prospera.
Rafa me había pedido un realismo limpio y estilizado así que mi inquietud estaba en cómo evitar sofisticarlo o por el contrario no caer en el hiperrealismo sucio de los barrios trabajando con cámara en mano muy encima de los personajes y con planos abiertos que retrataban el ambiente de una Sevilla casi documental. Al final buscamos cierto naturalismo abstracto y evitamos caer en lo costumbrista. Creo que logramos una atmósfera de indefinición temporal adecuado al punto de vista introspectivo de la protagonista desde el que se cuenta la historia. Un éxito para un primer trabajo que se estrenó en Cannes Series logrando el Premio a la mejor serie.